lunes, 15 de noviembre de 2010

Tonterías

¿Que importa que sea blanco, negro o morado?
Que sea ondulado o rugoso, pequeño, grande, amarillo, azul..
Uno es como es y no importa nada más.
Quisiera poder ser capaz de decirlo sin trabas y sin ataduras que me electrifiquen la lengua cada vez que pronuncio esas palabras tan dulces y tan dolorosas a la vez.
Equivocarme...claro que puedo equivocarme, una y mil veces, pero el valor de intentar hacer algo sin saber su final es de héroes.
¿Que hizo Ulises? ¿Renegó de todo cuanto conocía y amaba por no atreverse a cruzar el mar? No, el luchó contra viento y marea para alcanzar su corazón.
Yo no peleé nunca, me dejé llevar por el vaivén de las olas que golpean la ventana de mi pecho. Pero ahora tengo motivos para defenderme, para poder vivir cada día con una ilusión renovada.
Me importa un comino asado si tiene cinco o seis patas, cangrejo, langosta o calamar.

Dejémonos de tonterías

2 comentarios: